May 19, 2022
Las empresas no pueden quedarse quietas ni dormirse en los laureles. Tienen que seguir avanzando e innovando. Sólo de esta manera seguirán siendo competitivas. Pero no es algo que pueda hacerse a la ligera. Hay que saber qué se puede vender que sea innovador. Para poder crear un producto ganador que sea fabricado por nuestra cuenta, hay que seguir un proceso con pasos concretos hasta conseguirlo, y para saber sobre ello en este episodio contamos con Alexander Fedorowicz, director ejecutivo del QRxLabs, una marca de cuidado de piel. Es experto en temas de sourcing en América y posee una fábrica en Estados Unidos, donde produce actualmente la mercancía de su marca.
Alexander es muy claro al momento de hablar sobre su toma de decisiones, porque cuando estás armando tu empresa, no puedes tener errores o, por lo menos, cometer los menos posibles. Por eso, sus determinaciones se “basan en datos y no en su intuición”: “Eso es una buena idea para cualquier persona que se lance hoy o ya tenga su negocio”, destaca Alexander, y agrega: “Cuando usas eso para orientarte en tus decisiones, nunca estás lejos de la demanda y la realidad del mercado”.
Cuando finalmente escogieron la categoría de skincare, empezaron a analizar el mercado en detalle, “qué se vende, cuáles son los productos más vendidos, qué ingredientes contienen, cómo hacen las búsquedas los clientes”, etc., y al mismo tiempo estaban contactando a los proveedores. “Ellos te mandan las listas de sus productos, miramos la investigación que hicimos y empezamos a comparar todo eso”, detalla nuestro especialista.
Yendo a los inicios de su empresa, Alexander nos cuenta que no contaban con las máquinas ni sabían el producto que iban a vender. “Fuimos desarrollando el branding de la marca y en paralelo fuimos buscando proveedores, haciéndonos cargo nosotros del envasado y empaquetado. Los proveedores generalmente son laboratorios que fabrican productos que ya tienen algunas formulaciones que ellos desarrollaron. No es muy difícil encontrar eso, pero tenemos que preguntarnos cuál es el mejor, cuál tiene un precio razonable, etc.”, relata nuestro invitado.
“Al inicio comenzamos con un solo producto para hacer la prueba. Cuando ya teníamos ese producto vendiendo, empezamos a lanzar más productos complementarios”, narra Alexander. Parece fácil, pero esta etapa tiene que ser sostenida por un margen de dinero que cubra cualquier gasto, “y más cuando vamos a lanzar una marca que no es conocida en el mercado”. Según Alexander, “la gran mayoría de la gente no entiende que el costo para desarrollar una nueva marca es muy alto y, si no tienes el margen para soportar eso, a medio plazo se vuelve muy difícil porque muy poca gente tiene los recursos para seguir invirtiendo”.
Llegar a este punto significó un arduo trabajo que los hizo más expertos en la materia. El conocimiento es una ventaja que ayuda a mejorar y ahorrar en todo lo que está de más dentro de una compañía. Tal como refiere Alexander, cuando empezaron a ver los proveedores, los costos, etc., “se dieron cuenta que les convenía hacer todo lo que podían con su capacidad y recursos para tratar de minimizar los costos, tener más margen y poder invertir en el desarrollo de la marca”. “No sabíamos lo que era fabricar un producto porque no teníamos las máquinas, pero envasar no era difícil y vimos cómo hacerlo sin mucho riesgo y recuperando una parte del margen”, añade.
Finalmente, decidieron dejar de comprarles a los proveedores para fabricar ellos mismos sus productos. “Depender de un tercero tiene muchas consecuencias, ahí te das cuenta de la ventaja que tiene fabricar tu propio producto. Ayuda con los costos, pero también es la agilidad. Si tu producto despega y no puedes enviar más inventario a Amazon y te quedas sin stock, esto tiene un impacto inmenso, como el posicionamiento del producto en Amazon, el costo que cuesta recuperarse porque el cliente eligió a tu competidor porque no tenías el producto y tienes que volver a invertir en promoción para nuevamente darte visibilidad. Nosotros nos dimos cuenta que depender de un tercero hace que la agilidad nunca sea óptima”, desarrolla Alexander. Y a ello se le suma la disponibilidad de productos, porque “a veces los terceros no tienen los ingredientes y les llega dentro de unas semanas y no puedes hacer nada porque dependes de ellos”.
Sin dudas hay complejidades al momento de fabricar nuestro propio producto, pero eso no quiere decir que sea imposible. Hay procesos de fabricación que no son complejos y los precios de las máquinas muchas veces son accesibles. “Y encima muchos bancos están más dispuestos a financiar la compra de maquinaria que de inventario”, subraya nuestro invitado. A lo que también se le suma el avance de la tecnología, que disminuye los costos de una manera exponencial. “Si vas a fabricar tu propio producto para venderlo, vas a tener todos los mismos sistemas que cualquier otro vendedor de Amazon, y esto es así cuando hablas del sistema financiero, de recursos humanos, de envíos, etc. La diferencia que hay es la parte de la fabricación y lo que apoya el proceso de fabricación, que son los insumos”, describe Alexander.
Existe un sistema de planificación y administración de materiales, llamado MRP, el cual es de gran ayuda para la gestión de los insumos y del proceso de fabricación. Años atrás era impensado contar con ello, ya que su costo era tan alto que sólo las empresas de gran tamaño lo podían tener, pero actualmente cualquiera puede contratar este tipo de sistema en la nube, “sin instalar nada, sin contrato a largo plazo, pagando simplemente mes por mes y basado en lo que uno necesite, y con un costo extremamente razonable, tal vez de menos de 100 dólares por usuario por mes”.
Con la fabricación propia, cada empresa tiene que valorar sus pros y contras, siempre sabiendo que hay un buen número de consideraciones a tener en cuenta. Buscar nuevas oportunidades puede ser un aspecto clave para crecer y encontrar nuevos nichos de mercado interesantes. Además, apostar por una producción eficiente se puede convertir en un punto a favor para alcanzar la excelencia empresarial. “Es un proceso que no puedes hacerlo de un día a otro, es un proceso que se tiene que hacer paso por paso”, finaliza Alexander.
Página web: store.qrxlabs.com
LinkedIn: Alexander Fedorowicz